Blogia
decetinaychiton

Hoy 18 de mayo comienzan las fiestas en Cetina

Hoy 18 de mayo comienzan las fiestas en Cetina

Programa de fiestas en www.cetina.es o en http://usuarios.efor.es/cetina/fiestasmayo2009.htm

D Antonio Beltrán (q.e.p.d.) me autorizó a incluir sus textos en la web de Cetina, y decia:

Uno de los más interesantes ejemplos de las manifestaciones folklóricas de Aragón es la Contradanza de Cetina, con nombre que no le conviene ni por su sentido original de «country dance» o baile campestre ni como baile de salón con pasos y figuras dirigidas por un «bastonero» que dominó los entretenimientos de la aristocracia y la burguesía en el siglo XIX, y que fue imitado por el pueblo componiendo un delicioso híbrido con la conocida conducta de acomodar por imitación modos señoriales a través de un proceso de simplificación que comportan la intemporalidad y el anonimato; en este caso a las prácticas de los siglos XVII y XVIII el pueblo añadió otras seguramente muy antiguas aunque las supuestas vinculaciones con bailes celtibéricos o semejantes estén fuera de lugar.

 En la danza de Cetina hay una serie de elementos característicos muy bien definidos esencialmente el ser fiesta ritual de plenilunio, con iluminación de teas, intervención de un «diablo» (seguramente el nombre e idea tomada del «dance» ) y la base de la representación ocupada por «cuadros plásticos» que sólo remotamente pueden ponerse en relación con los «castillos» del dance, unos conservados como los de Tauste y presentes otros en las letras como el de Sariñena. «Torres» y «cuadros» componen la esencia de este baile que no tiene paralelo en Aragón ni fuera de aquí.
Sintéticamente la representación de cerca de dos horas de dos horas de duración, comenzando a las once de la noche, se ejecuta por ocho hombres dirigidos por el llamado «diablo» que además de dirigir mediante palmadas los movimientos de los danzantes cumple un extrañísimo rito de sacrificado.

Una de las peculiaridades es la de los vestidos, negros con adornos blancos o al contrario, blancos con variada decoración negra que sólo muy remotamente se asemejan a los semejantes a los de esqueletos de algunas danzas de la muerte como la de Verges (Gerona). El «diablo» va vestido de rojo, con adornos blancos y es el único que no cubre su cara con una careta. Las treinta mudanzas o cuadros plásticos terminan con una extraña pantomima que comporta el sacrificio del «diablo» quien moría entre gritos siendo después su cuerpo paseado por el pueblo. Sin que pueda relacionarse este apéndice con ninguna otra forma de bailes de salón. Los cuadros formados con los cuerpos humanos de los ocho ejecutantes, imitando a San Miguel venciendo al demonio, el Dios de las Aguas, es decir la fuente de Neptuno hoy en el Parque de Zaragoza, bandeo de las campanas, Virgen de Atocha, peana de San Juan Lorenzo, etc.

Se ejecuta el baile a compás de una música monótona obsesivamente repetida de la que Ángel Mingote escribió «La música con que actualmente se danza en Cetina es de poco o ningún interés y de fijo han debido desaparecer aires del «dance» antiquísimos y de interés». Desde luego ninguna música del dance aragonés es antiquísima y por descontado tampoco la de la Contradanza y cualquier vinculación con melodías celtibéricas o de la Edad Antigua es imposible con lo que sabemos y no puede ser llevada a antes del siglo XVIII.

En la danza de Cetina hay una serie de elementos característicos muy bien definidos: esencialmente el ser fiesta ritual de plenilunio, con iluminación mediante teas.
Existen muy pocos puntos de contacto de tal Contradanza con el dance de San Juan Lorenzo, aunque se celebre en honor al santo a través de cuadros plásticos de salón. Del conjunto sobresalen elementos muy viejos como el de la danza de plenilunio y el sacrificio del jefe que podría relacionarse con el mito indoeuropeo del «señor de los granos» y la redención, la semilla que ha de ser sacrificada y destruirse para que pueda germinar y salvar; y sin otro vínculo que el aspecto de los trajes con las danzas macabras secuela de las danzas-medievales de la muerte de toda Europa. Por otra parte al realizarse el baile sin otra luz que la de la de las teas que antes fabricaban los propios danzantes con papel de estraza encerado, la combinación de blanco y negro de las vestiduras era imprescindible para alcanzar suficiente visibilidad.

Leer más en: www.cetina.es/cetina_005.htm

0 comentarios